Elania, madre de tres y mercadóloga, cuya vida fue apagada por su expareja tras dos años separados
Junto a ella fue asesinada su madre Beatriz por su expareja, un capitán del Ejército, quien luego se suicidó
Ana Aybar
Elania Galarza Cabrera, licenciada en mercadeo, tenía 35 años, tres hijos y una vida dedicada por completo a su familia. Su madre, Beatriz Cabrera, era su pilar más firme y entre ambas existía un lazo tan profundo que ni la muerte pudo romper.
La noche del pasado martes, Samuel Mora Alcántara, capitán del Ejército y expareja de Elania, de quien se había separado dos años atrás, la llamó para decirle que pasaría a recoger a los dos hijos que tenían en común.
Aunque no era habitual que recogiera a los infantes entre semana, ya que solo los veía los fines de semana, ella accedió sin sospechar que el hombre, de 49 años, le arrebataría la vida a tiros junto a su madre, dentro de su vivienda en el sector Mejoramiento Social del Distrito Nacional.
Hechos
Pasadas las 9:00 de la noche, Samuel llegó a la vivienda y se encontró con la hija mayor de Elania, una adolescente de 15 años, fruto de una relación anterior, que jugaba frente a la casa.
"¿Dónde está tu mamá?", le preguntó. "Adentro", respondió la joven, sin imaginar la tragedia que acontecería.
El hombre entró a la vivienda, sacó a sus dos niños y los llevó donde un familiar. Luego volvió, pero ya no como padre, sino como verdugo. Asesinó a la madre de sus hijos y a su exsuegra. Horas después se suicidó.
Aun con vida, Eliana suplicaba a los vecinos "no me dejen morir", mientras intentaba con las pocas fuerzas que le quedaban arrastrar a su madre fuera de la casa. No obstante, Beatriz ya no respondía; había muerto en el acto.
La menor, que fue entregada a su padre biológico tras el suceso, conserva en la memoria ese último momento cuando escuchó los disparos y al entrar a la vivienda, se desmayó al enfrentarse con la escena.
"Bruto y celoso"
Según una vecina, el agresor era un hombre "bruto y celoso" que controlaba cada aspecto de la vida de Elania, lo que finalmente la llevó a separarse.
"No la dejaba tener amistades ni hablar con nadie, por eso lo dejó", relató Laura Ramírez con la voz quebrada.
"Ella (Beatriz) veía cómo él trataba a su hija, por eso no lo quería", explicó un familiar, al tratar de encontrar algún sentido al doble feminicidio, de quien solo buscaba criar a sus hijos y cuidar de su madre.
"Él la maltrataba y la amenazaba, le dije que denunciara, pero me respondió que no lo haría, que no creía que él hiciera algo", relató con voz quebrada su prima, Francia Cabrera, quien jamás pensó que esa decisión derivaría en tragedia.
Para los familiares, el vínculo entre ambas era inquebrantable, más fuerte que el tiempo y la rutina. Lo compartían todo. Incluso, de forma desgarradora, el mismo final. Hoy, tres niños han quedado sin madre, y una abuela perdió la vida tratando de proteger a su hija.
Ana AybarEgresada de la Universidad Católica Santo Domingo. Apasionada por el periodismo humano, con experiencia destacada en temas políticos, culturales y de moda.
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