El Ney Arias Lora ve unos 33 heridos diarios en accidentes de tránsito y el número sube cada año
Las campañas de educación vial, los operativos y las normas sobre el uso de casco y chaleco reflectivo no han logrado reducir los ingresos

El flujo de lesionados por accidentes de tránsito en el Hospital Traumatológico Ney Arias Lora no se detiene. Las cifras crecen año tras año y muestran que el problema del trauma vial sigue sin control en el país.
Entre 2017 y 2024, el centro ha registrado un aumento sostenido de ingresos por choques y caídas en las vías públicas. En 2017 atendió 4,122 pacientes, y en 2018 la cifra se duplicó hasta 8,804. En 2019 fueron 8,593, un volumen que mantuvo al hospital al límite de su capacidad en trauma y cirugía.
Ni siquiera la pandemia redujo el impacto del tránsito. En 2020 los accidentados subieron a 9,827; en 2021 fueron 9,745; en 2022, 9,694; y en 2023, 11,062. El 2024 cerró con 12,376 pacientes lesionados. Solo en el primer semestre de 2025 ya se contabilizan 6,173, lo que anticipa otro año por encima de las 12,000 víctimas.
Los datos de los últimos dos períodos arrojan un promedio diario de 33 lesionados diarios por accidente de tránsito.
Cada año hay más accidentados, más cirugías y mayor presión sobre los servicios hospitalarios. Las campañas de educación vial, los operativos y las normas sobre el uso de casco y chaleco reflectivo no han logrado reducir los ingresos.
El mayor peso de las cifras recae en los motociclistas, quienes protagonizan la mayoría de los casos. En los primeros seis meses de 2025, de los 6,173 lesionados, 5,914 viajaban en motocicleta. Solo 102 se desplazaban en automóvil, 12 en autobús y 145 en otros medios de transporte. La proporción es constante desde hace años: nueve de cada diez víctimas viajan en motor.
Cirugías y emergencias en aumento
Lo mismo ocurre con los procedimientos realizados. Desde 2017 hasta junio de 2025, el centro pasó de realizar 3,323 cirugías a 9,565, casi el triple.
El año 2018 marcó un punto de inflexión, cuando el total de operaciones creció 189 % respecto a 2017 (de 3,323 a 9,616). Desde entonces, el hospital no ha vuelto a bajar de los siete mil procedimientos anuales, a pesar de las oscilaciones provocadas por la pandemia.
En 2019, la cifra descendió a 7,700 cirugías (-19.9 %), y en 2020, durante el confinamiento, cayó a 6,083 (-21 %). Sin embargo, el flujo volvió a dispararse en 2021, con 8,821 operaciones (+45 %), y desde entonces el crecimiento ha sido constante: 9,320 en 2022, 9,547 en 2023 y 9,565 en 2024.
El primer semestre de 2025 ya suma 4,810 cirugías. Si se mantiene el mismo ritmo, el año cerraría con unas 9,600 intervenciones, un nivel similar al del año anterior.
Durante el mismo período se practicaron 342 cirugías maxilofaciales en emergencia, asociadas a impactos directos o caídas desde motocicletas. En total, se realizaron 1,648 cirugías generales, 170 neurocirugías y 124 intervenciones maxilofaciales en quirófano, cifras que confirman la saturación del centro.
Cada paciente accidentado representa un alto gasto sanitario: ambulancia, estudios, internamiento, cirugía y rehabilitación. Desde 2017, la cantidad de lesionados no ha disminuido un solo año. El 2023 superó los once mil casos, el 2024 rompió la barrera de los doce mil y el 2025 apunta al mismo nivel.


Omar Santana