Universidad de Pensilvania excluye a deportistas transgénero de sus equipos femeninos
La institución restituirá a las atletas todos los récords y títulos individuales que se llevaron atletas masculinos autorizados a competir en categoría femenina

La Universidad de Pensilvania acordó no aceptar más atletas transgénero en sus equipos femeninos, tras la polémica suscitada por el caso de la nadadora Lia Thomas, anunció este martes el Departamento de Educación de Estados Unidos.
El acuerdo se produce tras una reciente investigación del Departamento de Educación, que se basó en una ley federal que prohíbe la discriminación de género en los programas educativos, después de que la nadadora transgénero Lia Thomas compitiera en carreras femeninas en 2021 y 2022 con esta universidad ubicada en Filadelfia (noreste).
La prestigiosa alma mater "adoptará a partir de ahora las definiciones biológicas de hombre y mujer" y "no permitirá que los hombres participen en programas atléticos femeninos", según el comunicado del ministerio sobre los términos del acuerdo.
La institución también se comprometió a "restituir a las atletas todos los récords y títulos individuales (...) que se llevaron atletas masculinos autorizados a competir en categoría femenina" y a "enviar una carta de disculpa personalizada a cada nadadora afectada".
La referente
Lia Thomas, primera nadadora transgénero en ganar una competición universitaria en Estados Unidos en marzo de 2022, encarnó la candente cuestión de la participación de deportistas transgénero en pruebas femeninas.
Récords de Lia Thomas
Thomas compitió durante un año como nadadora para Penn tras tres temporadas compitiendo en el equipo masculino. Tiene los récords de natación femenina de Penn en los 100 metros libres (47.37), 200 metros libres (1:41.93), 500 metros libres (4:33.24), 1000 metros libres (9:35.96) y 1650 metros libres (15:59.71).
Thomas ganó su título de la NCAA en los 500 metros libres femeninos en 2022. También empató en el quinto lugar en los 200 metros libres femeninos y fue octava en los 100 metros libres ese año.
Sus resultados suscitaron un acalorado debate en el que críticos argumentaban que, al haber competido como hombre en el pasado, disfrutaba de una ventaja fisiológica injusta.
Durante la campaña presidencial, el republicano Donald Trump prometió acabar con el "delirio transgénero".
El presidente pasó a la ofensiva contra la participación de deportistas transexuales en competiciones femeninas poco después de su regreso a la Casa Blanca en enero, con amenazas de recortar las subvenciones federales a las organizaciones que no le apoyaran.
En el ámbito internacional, las federaciones de atletismo, de natación y de ciclismo exigen una transición "antes de la pubertad", lo que equivale prácticamente a una exclusión, ya que la mayoría de países no permiten un cambio de género tan precoz.