Omerlin Estévez y su sueño dorado para los Juegos Centroamericanos de Santo Domingo 2026
Tiene la primera medalla a nivel panamericano en patinaje

Omerlin Estévez tiene el mérito de ser el primer dominicano que gana una medalla en un campeonato panamericano de patinaje en la modalidad de velocidad.
Ahora quiere extender su hazaña a los Juegos Centroamericanos y del Caribe Santo Domingo 2026 (julio 24/agosto 8).
Estévez se encuentra en Cartagena, Colombia en una base de entrenamientos que el próximo viernes completa los 15 días.
La medalla que ganó la ve como "un paso muy importante para mí y la Federación (Dominicana de Patinaje) para abrir puertas para los Juegos Centroamericanos", reconoce el atleta del club Skating Club 3R.
Pero va por parte. No se quiere adelantar, pues tiene claro que primero luchará por un podio en los Juegos Bolivarianos (noviembre 22, diciembre 7).
El patinador, de 22 años, nacido en Los Mina, Santo Domingo, pero en Santiago desde los dos años, conquistó bronce en la prueba de 100 metros sprint masculino en el Panamericano en Guarne, Colombia.
"Es la primera de la historia y trae muchas lágrimas, mucho sudor, alegría, emociones positivas como negativas", dice desde Cartagena a a Diario Libre el corredor del Club Skating Club 3R. La razón es porque llevaba "11 años" trabajando para esa medalla.
Restan para el día de apertura de los Juegos Centroamericanos Santo Domingo 2026, señalado para el 24 de julio.
En ese evento, el pasado 9 de julio, detuvo el cronómetro en 9.977 segundos, tiempo solo superado por el guatemalteco Faberson Bonilla (9.902), ganador de oro y el colombiano Alejandro Tabares (9.935), plata.
Ahora que tiene su medalla se le ha estimulado más el apetito. "Ahora quiero una de oro, trabajar por una de oro", señaló. "Porque no soy un atleta conformista, porque sea la primera de la historia. No, yo quiero seguir por más".
Junto a él, en Cartagena, están Sergio Sena y José Santos, quienes competirán en los Juegos Panamericanos Juveniles de Paraguay.
Ganar esa medalla lo transportó a Santo Domingo 2026, claro de su objetivo. "Oh", reacciona, "pero yo estoy trabajando para Santo Domingo 20-26". Y "le doy gracias a Dios que me dio esa medalla, pero en realidad trabajé para oro". Ese oro no llegó porque tuvo algunos cuantos fallos técnicos en la salida. Pero "gracias le doy a Dios que me dejó agarrar un bronce", señala el velocista que tiene hasta tres sesiones de entrenamientos por día.