Italiana muerta por suicidio asistido pidió a los parlamentarios que sean "seres humanos"
La periodista Laura Santi, de 50 años, padecía esclerosis múltiple y era un rostro reconocido de la campaña "Eutanasia Legal"

La periodista Laura Santi, la novena persona en acceder al suicidio asistido en Italia, pidió a los parlamentarios italianos que comporten como "seres humanos" y "que se preocupen por el sufrimiento de los enfermos más graves", en un videomensaje divulgado por su esposo este miércoles, dos días después de su muerte.
Santi, de 50 años, padecía esclerosis múltiple y era un rostro reconocido de la campaña 'Eutanasia Legal'. Murió en su casa de Perugia (norte) el lunes 21 de julio tras la autoadministración de un fármaco letal", según informó la Asociación Luca Coscioni, que lucha por la establecer una ley de eutanasia en el país.
"Les pido sentido común como seres humanos" porque "no quiero dejar un país que ignora y se burla del sufrimiento de los enfermos más graves" dice dirigiéndose directamente a los parlamentarios en el mensaje publicado en las redes sociales por su marido, Stefano: "Ocúpense, se lo suplico de corazón".
Afectada por una forma avanzada y progresiva de esclerosis múltiple, Santi obtuvo el visto bueno de su autoridad sanitaria local (ASL) el mes pasado, dos años y medio después de haber presentado la solicitud para acceder al suicidio asistido, y tras un complejo recorrido judicial, tanto civil como penal.
"Diputados que van a debatir hoy sobre el final de la vida. Soy Laura Santi, y cuando vean este vídeo, ya no estaré aquí porque habré decidido dejar de sufrir por voluntad propia y por derecho propio", comienza la periodista en su mensaje.
Tras relatar detalladamente los efectos de una enfermedad que sufrió durante 29 años, que le "quitó" las piernas y los brazos y le provocó "un deterioro físico y neurológico, lamentablemente irreversible y progresivo" la periodista pidió a los parlamentarios que no aprueben el proyecto de ley del Gobierno de Giorgia Meloni.
"Es verdaderamente nefasto, les pido como seres humanos que lo rechacen" porque "no es su intención regular el final de la vida, sino de excluir ese derecho. No tengan miedo, no llevará a ningún abuso, porque ya está rigurosamente regulado hoy en día por la jurisprudencia (...) Hoy les pido sentido común", afirma.
"El fin de la vida"
El texto presentado por el Gobierno de la ultraderechista Meloni sobre "el fin de la vida", que acaba de llegar al Senado, ha sido criticado por las organizaciones que luchan por la eutanasia, que aseguran que ha sido acordado con el visto bueno del Vaticano y "privatiza" el suicidio asistido al excluir a la Sanidad pública.
"Hoy es Laura quien les habla a ustedes como seres humanos, estoy segura de que después de ver este vídeo razonarán mejor, actuarán en la votación según la conciencia de los seres humanos", concluye.
El caso de Laura Santi atravesó numerosos obstáculos legales: dos denuncias, dos requerimientos formales, un recurso de urgencia y una reclamación contra su empresa sanitaria.
Solo en noviembre de 2024 recibió el informe médico que confirmaba que cumplía con los requisitos establecidos por la sentencia 242/2019 del Tribunal Constitucional, que también reguló los criterios para el suicidio asistido, pero invitó al Parlamento a legislar al respecto.
La ausencia de una ley nacional ha obligado en los últimos años a las distintas regiones italianas a estudiar cada caso que se les presentaba de forma individual, mientras que algunos pacientes han optado por acudir a Suiza.