Sin prisa, sin falsedades
Tragedias sin morbo, lo que las víctimas merecen
En momentos de tragedia, como el desplome del techo de la discoteca Jet Set, lo más sensato y responsable es mantener la prudencia informativa. Con más de 200 fallecidos y decenas de heridos, las víctimas y sus familias no necesitan una avalancha de especulaciones que solo agravan el dolor. La búsqueda de explicaciones express deriva en rumores infundados que desvían la atención de lo fundamental: la necesidad de una investigación rigurosa, a cargo de expertos, que esclarezca los hechos.
El caso reciente del accidente de helicóptero en Nueva York, que costó la vida a una familia española de seis miembros, es ilustrativo. La responsable de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), Jennifer Homendy, advirtió pasado un día del suceso que era irresponsable aventurar causas sin pruebas. En este tipo de investigaciones, incluso con recursos técnicos de primer nivel, se requiere tiempo para examinar restos, reconstruir escenarios y entender el encadenamiento de eventos que lleva a una tragedia.
En la República Dominicana, deberíamos adoptar esa misma cultura de seriedad informativa. En modo alguno se trata de ocultar hechos, sino de respetar los tiempos de la investigación y el dolor de las personas. La prisa por tener una "verdad" inmediata solo multiplica los daños. En vez de alimentar teorías sin sustento, toca exigir transparencia, profesionales competentes y procesos claros para que las causas reales salgan a la luz.
El país merece respuestas, pero, sobre todo, más respeto. La dignidad de las víctimas se honra también con el silencio prudente, la espera responsable y la acción institucional firme. Lo sencillo —buscar la verdad sin prisas ni falsedades— puede tomar tiempo, pero es el único camino hacia la verdadera justicia.