×
Versión Impresa
versión impresa
Secciones
Última Hora
Podcasts
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Juegos
Herramientas
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Redes Sociales

La fe razonada

Graciela Abinader invita a pensar la fe desde la razón y no desde la repetición

Más que un gesto de irreverencia juvenil, la reflexión de Graciela Abinader Arbaje sobre la práctica religiosa en el país y las Escrituras, es una invitación a pensar la fe desde la razón y no desde la repetición. Su crítica a la religión organizada en República Dominicana —a esa lectura literal y dogmática de la Biblia— toca una herida abierta. Hay distancia entre lo que se predica y lo que se entiende, entre el texto y su espíritu. Cuando afirma que "quien usa la palabra de Dios sin entenderla, no está predicando fe, está predicando ignorancia", dignifica la fe, no la desafía.

El cristianismo no nació como una estructura rígida, sino como un camino —syn-hodos, caminar juntos—. De ahí que la idea de una Iglesia sinodal, promovida por el papa Francisco, encaje como respuesta natural al malestar que expresa Graciela. La sinodalidad regresa la Iglesia a su origen y evita su destrucción. Busca una comunidad que escucha, que dialoga y que se deja transformar por la experiencia del otro.

En una sociedad donde la religión muchas veces se usa para condenar, la sinodalidad propone comprender; donde se busca imponer, invita a discernir. No pretende relativizar la verdad, sino humanizarla. Si la palabra divina se encarna en lo humano, también debe entenderse con las herramientas de la inteligencia y la historia.

El reclamo de Graciela Abinader —que la Biblia no se lea como arma, sino como camino— se alinea con esa Iglesia que el papa Francisco imaginó: más abierta, más culta, más consciente de su tiempo. Tal vez la verdadera conversión que el país cristiano necesita no sea solo moral, sino intelectual. Pasar de creer sin pensar, a pensar creyendo. Eso es, en el fondo, la forma más alta de fe.

TEMAS -

Aníbal de Castro carga con décadas de periodismo en la radio, televisión y prensa escrita. Toma una pausa en la diplomacia y vuelve a su profesión original en DL.