Senasa: el caso para que Abinader dé un ejemplo de lucha contra la corrupción
Sociedad exige que lucha anticorrupción alcance al presente gobierno

El pasado sábado 13 de septiembre, el director de Comunicaciones de la Presidencia, Félix Reyna, acompañado del subdirector de Comunicaciones de la Presidencia, Abel Guzmán, y el director de Prensa del Presidente, Alberto Caminero, dieron a conocer la información de que el gobierno depositaba ante la Procuraduría General de la República el hallazgo de irregularidades en la pasada gestión del doctor Santiago Hazim al frente del Seguro Nacional de Salud (Senasa).
Al mismo tiempo, el superintendente de Salud y Riesgos Laborales, Miguel Ceara Hatton, en compañía del actual director ejecutivo de SeNaSa, Dr. Edward Guzmán, depositaban ante el Ministerio Público la denuncia de irregularidades en SeNaSa.
El caso es un reto para la administración del presidente Luis Abinader. El mandatario llegó al poder en el 2020 con la promesa de enfrentar la corrupción y acabar con la impunidad. Tener que afrontar la corrupción en su gobierno es un desafío muy grande para el gobernante.
El tema Senasa parece tener un entramado entre lo público y lo privado, para extraer millones de pesos de los asegurados a través de la Administradora de Riesgos de Salud más grande del país. Hablamos de contratos entre familiares cercanos al funcionario, otros de servicios que se pagaban y no se entregaban y la privatización de las atenciones que se otorgaban a los miembros del sistema subsidiado, entre otras cosas.
Desde que fue movido del cargo, el Dr. Hazim había guardado silencio y, cuando menos se esperaba, salió a defenderse. Afirmó que es un hombre honesto y ratificó que presentó una denuncia ante la Procuraduría por la estafa de unos 40 millones de pesos. Sin embargo, la investigación es por un déficit de más de 12 mil pesos o hasta 20 mil millones pesos.
La denuncia del equipo de Hazim parece ser un cortina de humo, con el error de que en la misma dicen que la estafa se estaba produciendo desde el año 2021 al 2024. Aquí cabe la pregunta: ¿por qué, si se dan cuenta de dicha estafa y el tiempo de la misma, esperaron hasta noviembre del 2024 para denunciarla?
La cierto es que la sociedad ha apoyado la lucha contra la corrupción desde que Abinader llegó al gobierno y que lo respaldará en lo adelante, pero esta vez es contra lo suyo. Por eso, el presidente está obligado a demostrar que tiene "amigos, mas no cómplices".
La sociedad ahora espera las acciones del Ministerio Público. Este tendrá que demostrar que su combate a la corrupción no solo es con el pasado, sino que es permanente, porque la lucha contra este flagelo es con el pasado, presente y futuro.