La tranquilidad política en el ambiente
La oposición se ha tomado un largo asueto
Entre la Semana Santa y los sucesos previos a esta, la oposición política en el país parece que tomó unas largas vacaciones de las que todavía no parece salir.
En toda buena democracia, como la que se intenta construir en la República Dominicana, deben existir contrapesos que mantengan el equilibrio en una sociedad que, aunque ha comenzado a desarrollarse, sigue enfrentando serios retos.
Por eso, esos largos descansos no lucen muy halagüeños, sino que amenazan con tambalear lo que con tanto esfuerzo se ha construido.
Ayer, el presidente Luis Abinader hacía un llamado a los principales dirigentes opositores a unirse a los empeños en el tema migratorio, principalmente por el plan comenzado ayer en los hospitales.
Ese es un tema del que es fácil engancharse por los sentimientos que genera entre todos los involucrados.
Pero cada quien tiene que jugar su rol, y no necesariamente dejar la cancha abierta para que el que tiene el balón en las manos tire de tres sin defensa alguna.
Obviamente, haciendo las cosas de manera lógica y sensata, sin perder la cordura.
Solo así lograremos avanzar como nación, como sociedad.