Informales
El aumento de la informalidad no es una buena noticia
El aumento de la informalidad no es buena noticia. La recuperación del empleo tras la pandemia fue exitosa, pero ya el Ministerio de Economía alertó de que el empleo recuperado no era de la mejor calidad y advertía del aumento de la informalidad.
En el sector de la construcción la situación se complica por el hecho de la gran presencia de mano de obra extranjera, a menudo indocumentada, que ocupa.
Una tarea para el Ministerio de Trabajo, el de Economía y la patronal del sector que deberán, sin duda, emplearse a fondo para buscar una solución que satisfaga al trabajador, al empleador y a la administración. Que no paralice el crecimiento que se evidencia en todo el país de esta actividad, que además, es una de las que más crecimiento asociado generan, porque arrastran al empleo indirecto y a la actividad de los otros sectores.
Los retos son muchos. El desabastecimiento de artículos y materias primas ya está causando problemas a los promotores y la inflación desanima a los compradores. La informalidad es un arma de doble filo, con aparentes ventajas y “ahorros”, pero no conviene a nadie.