No se aceptó la brutalidad
Cinco jóvenes abatidos en La Barranquita reavivan debate sobre uso de la fuerza
Fuera de récord, las autoridades insisten en que los cinco jóvenes abatidos en La Barranquita tenían cuentas pendientes con la ley o que planeaban un asalto.
Poco importa, se puede pensar. Pero sí. En esta oportunidad, el Ministerio Público ha actuado y acusa a los policías participantes en la matanza.
Queda claro, y es lo relevante, que la autoridad acepta que el sello criminal, falso o cierto, no justificaba la brutalidad en el caso. Es el razonamiento lógico al comprobar la dureza de las acusaciones, expuestas en el conocimiento de las medidas de coerción contra los imputados. Todos tenemos derechos en democracia.