×
Compartir
Versión Impresa
versión impresa
Secciones
Última Hora
Podcasts
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Juegos
Herramientas
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Redes Sociales

Premio al Mérito Periodístico – Acroarte

Este premio hoy se llama Aníbal De Castro, pero en el fondo, es un homenaje a una profesión que no siempre goza del reconocimiento que merece: el periodismo

Expandir imagen
Premio al Mérito Periodístico – Acroarte

Muy buenas noches.

Recibir el Premio al Mérito Periodístico que otorga Acroarte es, para mí, un inmenso honor. Lo agradezco con humildad, en nombre propio, ciertamente, pero sobre todo en nombre de todos aquellos colegas que ejercen este oficio con decencia, perseverancia y sentido del deber.

Este premio hoy se llama Aníbal De Castro, pero en el fondo, es un homenaje a una profesión que no siempre goza del reconocimiento que merece: el periodismo.

En tiempos en que cualquiera con acceso a una red social se cree autorizado para informar, para opinar sin contexto, para difundir sin verificar, el periodismo se vuelve más necesario que nunca. 

No basta con tener voz: hay que tener criterio. 

No basta con estar presente: hay que saber mirar. 

No basta con decir: hay que saber decir la verdad.

El periodista —el verdadero— no improvisa: contrasta. 

No solo narra: interpreta. 

No se ampara en el anonimato ni se deja arrastrar por la marea de likes. 

El periodista asume el riesgo de pensar con independencia y el compromiso de hablar con responsabilidad.

Esa es la diferencia fundamental con la claque del ecosistema digital, donde abundan los replicadores de rumores, los indignados profesionales y los opinadores de ocasión, sin olvidar a los difamadores sin posibilidad de redención. 

Ellos propagan. Nosotros, los periodistas, tratamos de comprender. 

Ellos escandalizan. Nosotros, o intentamos al menos, explicar sin escándalo.

Tampoco deberíamos llamarles comunicadores, porque comunicar —de verdad— exige más que presencia: exige formación, propósito, códigos y responsabilidad. 

El comunicador transmite y traduce con conciencia. No lanza mensajes al azar.

Hoy, al recibir este reconocimiento, quiero compartirlo con todos los colegas que se esfuerzan para cubrir una fuente, que se exponen para contar una historia, que resisten presiones para no ceder en su integridad. 

Con los que escriben desde redacciones olvidadas, desde medios independientes o desde la soledad de una columna semanal.

A todos ellos —a todos ustedes— extiendo este premio.

Gracias a Acroarte por este gesto que honra, no solo una trayectoria, sino una forma de entender el periodismo como vocación.

Y gracias al periodismo por darme un lugar desde donde mirar el mundo con ojos abiertos y con palabra propia.

Muchas gracias.


TEMAS -

Aníbal de Castro carga con décadas de periodismo en la radio, televisión y prensa escrita. Toma una pausa en la diplomacia y vuelve a su profesión original en DL.