Aquí te contamos en qué están Lupita, Jean Pedro y Sharkito

Rescatar animales silvestres y reintroducirlos en sus hábitats naturales es una práctica de suma importancia tanto para la conservación de especies en peligro como para la salud de los ecosistemas en general. La intervención humana ha sido una de las principales causas de la disminución de muchas poblaciones animales, ya sea por la destrucción de hábitats, la caza furtiva o el comercio ilegal de fauna.

Además, el rescate y reintroducción de animales silvestres tienen un valor educativo y de concienciación social. Estas acciones pueden sensibilizar a la población sobre la importancia de la conservación y fomentar una mayor responsabilidad ambiental.

Sin embargo, el proceso de reintroducción no está exento de desafíos. Requiere una planificación meticulosa, estudios científicos rigurosos y una evaluación constante para asegurar que los animales puedan sobrevivir y prosperar en su entorno natural. Además, es esencial considerar los factores genéticos, las enfermedades y la disponibilidad de recursos en el hábitat receptor.

Uno de los proyectos más ambiciosos y exitosos de reintroducción a la vida silvestre en el país fue el de los manatíes Juana, Pepe y Lupita. A pesar de la muerte de Juana y Pepe, la reintroducción y adaptación de los tres animales a la vida silvestre fue un éxito.

Así también, cautivó a la población el rescate del pequeño manatí Jean Pedro en San Pedro de Macorís por un pescador local en el 2023, el pasado 16 de junio se cumplió un año de su rescate.

Y más recientemente, el rescate de un tiburón nodriza o gato, bautizado por elección popular como Sharkito, que fue encontrado moribundo con un disparo en la cabeza por desconocidos en Punta Cana.

Diario Libre conversó con Fundemar e hizo una visita al Acuario Nacional para saber la situación actual de estos tres animalitos.

Lupita

Esta manatí cumplió el pasado 27 de junio 3 años de haber recibido la libertad en Bayahíbe, junto a dos manatíes más, Juana y Pepe, en un proyecto liderado por El Ministerio de Medio Ambiente, El Acuario Nacional y Fundemar.

Lupita ya tiene aproximadamente ocho años de edad y pasa la mayor parte del tiempo en Boca de Yuma, donde ha creado una estrecha relación con esa comunidad.

Ya no posee un rastreador satelital, por lo que sus andanzas se conocen por los reportes frecuentes de pescadores que la ven entrar y salir del río.

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Rachel Plekaniec, Coordinadora del Programa de Megafauna de Fundemar, dijo a Diario Libre que el pasado 30 de mayo en un monitoreo de rutina de Lupita, la encontraron en el río de Boca de Yuma. "Se pudo observar que se encuentra en buen estado de salud, a pesar de que las condiciones de visibilidad no eran adecuadas debido a las lluvias importantes. Desde su liberación es la primera vez que la pudimos observar alimentándose de mangle, teniendo siempre una preferencia por las praderas y limo. Fue una alegría verla completamente adaptada a la vida silvestre", concluyó la experta.

Lupita se ha convertido en una destacada embajadora de su especie.

Jean Pedro

El viernes 16 de junio de 2023, un joven pescador llamado Jean Carlos y los ciudadanos Diego Bautista y su esposa rescataron una pequeña cría de manatí que se encontraba sin su madre cerca de la playa El Faro, en la provincia de San Pedro de Macorís.

Después de un fin de semana de búsqueda, los equipos del Ministerio de Medio Ambiente y la Fundación Dominicana de Estudios Marinos (FUNDEMAR) no pudieron hallar a la madre. El manatí fue nombrado "Jean Pedro" en honor al pescador que lo rescató y a la provincia donde fue encontrado.

El joven Jean Pedro sigue creciendo bajo los cuidados de técnicos y veterinarios del Acuario Nacional. Desde hace pocos meses se le ha introducido alimentos sólidos, en especial hierbas marinas.

Jean Pedro llegó de pocas semanas de nacido y ha ganado mucho peso y talla. Diario Libre visitó recientemente al manatí y pudo observar como era alimentado con leche por cuidadores.

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Al llegar al Acuario nacional pesaba 89.5 libras y medía tan solo 122 centímetros de largo. Al 26 de abril de este año ya medía 172 centímetros de largo y 208.3 libras de peso.

Se espera que a principios de 2025 se inicie el proceso de reintroducción a la vida silvestre.

Sharkito

Según el reporte de varamiento realizado por el Acuario Nacional,el 26 de abril de 2024, la Fundación Grupo Punta Cana informó sobre un tiburón herido en la playa frente a la Acuática de ClubMed, lo que llevó a una intervención inmediata del equipo técnico del Acuario Nacional, encontrando un tiburón nodriza (Ginglymostoma cirratum), con una herida visible y signos de daño neurológico, posiblemente causado por una bala en la cabeza con orificio de entrada y salida.

El tiburón fue trasladado a la Clínica Veterinaria del Acuario Nacional para una evaluación más detallada y para seguir los protocolos adecuados.

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El tiburón fue puesto en cuarentena y se observó que tenía dificultades para nadar debido a la herida en la cabeza, lo que afectaba su sistema vestibular. Se le brindó tratamiento médico, incluyendo la limpieza y cura de la herida, y alimentación asistida. Con el tiempo, se observó una mejoría gradual en su estado, aunque continuaba mostrando movimientos erráticos y vueltas en círculo. A lo largo de las semanas, el tiburón empezó a aceptar más alimentos y mostró signos de recuperación.

A la fecha, el tiburón ha mejorado notablemente, aceptando alimentos por sí solo y mostrando un comportamiento más estable. La herida sigue sanando y los problemas neurológicos se redujeron.

Como el proceso de recuperación se ha observado una evolución positiva en su alimentación y comportamiento, se espera que siga progresando para decidir sobre su futuro en libertad o cautiverio.

Marvin del Cid

Guatemalteco con estudios en Ciencias de la Comunicación y amplia experiencia en el campo visual y multimedia. Ha trabajado para varios medios de comunicación en Guatemala y República Dominicana, y sus fotografías han aparecido en importantes publicaciones en diferentes partes del mundo.