Miches superó en agosto los resultados de conservación de tortugas marinas del 2023 y 2024
En lo que va de la temporada, el programa Protortuga logró más huevos salvados que en los dos años anteriores completos

La temporada de anidación de 2025 en Miches marca un punto de inflexión en la conservación de tortugas marinas en República Dominicana. Este ciclo, que se extiende de marzo a octubre, registra hasta agosto un total de 3,630 huevos protegidos en 40 nidos, según el Programa de Monitoreo y Protección de Tortugas Marinas de Miches (Protortuga).
La cifra ya supera los resultados alcanzados en todo 2023 (1,562 huevos) y 2024 (1,866 huevos).
Esto significa que, aún sin concluir la temporada, el volumen de nidos recuperados ofrece una proyección alentadora: si se mantiene o supera el promedio de eclosión observado en años anteriores, 2025 podría cerrar con el mayor número de crías liberadas al mar en la historia reciente del programa.
¿Cómo se protegen los nidos?
Protortuga explicó a Diario Libre que no todos los nidos se manejan de la misma manera. En algunos casos, las puestas permanecen in situ (en la playa donde la hembra depositó los huevos), siempre que no existan amenazas graves.
Sin embargo, cuando un nido corre riesgo por erosión, inundación, depredación natural o saqueo humano —ya sea para consumo o para su venta en el mercado negro—, los huevos son extraídos cuidadosamente y trasladados a viveros, o bien reubicados en otras áreas más seguras.
Este año, de los 40 nidos registrados, 25 se mantienen en viveros bajo condiciones controladas, mientras que 15 fueron reubicados en otras zonas de playa bajo la modalidad ex situ. De ese total, todavía permanecen en incubación nueve nidos: uno en su lugar original (in situ) y ocho reubicados.

¿Qué es Protortuga?
Protortuga es un programa que funciona bajo una alianza público–privada–comunitaria entre Promiches, el Ministerio de Medio Ambiente y el sector turístico, con el respaldo de empresas como Tropicalia, Club Med Michès, CEPM, Viva Miches, Zemí Hilton y otros aliados estratégicos.
Fue creado por la Asociación de Hoteles y Turismo El Seibo-Miches (Promiches) y el Ministerio de Medio Ambiente. Monitorea más de 50 kilómetros de playas entre Miches y La Vacama, con patrullajes diarios durante la temporada de anidación.
El equipo registra y protege nidos, traslada aquellos en riesgo a viveros y recolecta datos científicos para medir la salud de las poblaciones. Además, trabaja con hoteles y comunidades locales para reducir impactos como la iluminación artificial en playas y el tránsito de vehículos sobre dunas.
Miches: polo clave de anidación
Las playas de Miches y La Vacama, entre ellas Esmeralda, Limón y Celedonio, son uno de los principales polos de anidación de la tortuga tinglar en República Dominicana. Aquí también anidan tortugas carey y verdes, especies que cumplen funciones esenciales en los ecosistemas marinos, desde el control de esponjas hasta el mantenimiento de los pastos marinos.
Miches es uno de los principales polos de anidación de la tortuga tinglar (Dermochelys coriacea), la más grande del mundo, que puede recorrer más de 10,000 kilómetros en sus migraciones.
También anidan aquí la carey (Eretmochelys imbricata), especie crítica para los arrecifes de coral, y la verde (Chelonia mydas), esencial para la salud de los pastos marinos.
El aumento en el número de nidos protegidos refleja no solo un mayor esfuerzo de vigilancia, sino también la relevancia de estas playas para la supervivencia de especies en riesgo global.
Conservación y comunidad
El esfuerzo de Protortuga no se limita a la protección directa. Más de 280 comunitarios han participado en programas educativos en lo que va de temporada, y se han realizado siete liberaciones controladas junto a huéspedes de hoteles de Miches.
Estas actividades buscan integrar a la población local y al sector turístico en la conservación, dentro de un modelo de turismo regenerativo y responsable.
Una nueva amenaza
A los retos históricos como la pérdida de hábitat y el saqueo de nidos, se suma una amenaza emergente: la fibropapilomatosis, una enfermedad viral que provoca tumores externos en las tortugas, especialmente en la especie verde.
Estos crecimientos pueden afectar su visión, movilidad y capacidad de alimentarse. En República Dominicana ya se han registrado casos recientes, lo que subraya la necesidad de reforzar no solo la protección de nidos, sino también la investigación y el monitoreo de la salud de las poblaciones marinas.
Como la temporada de anidación se extiende hasta finales de octubre, los datos finales aún podrían aumentar de manera significativa. La tendencia, sin embargo, es clara: 2025 será un año récord para la conservación de tortugas marinas en Miches y un ejemplo de cómo la articulación entre comunidades, Estado y sector privado puede traducirse en resultados concretos para especies en peligro de extinción.
El caso de Miches demuestra que, cuando existe articulación entre comunidades, sector privado y Estado, la conservación de especies en riesgo puede ofrecer resultados medibles en muy poco tiempo.
El reto ahora es sostener estos avances y reforzar la investigación científica, pues la salud de las tortugas marinas es un termómetro del estado de los ecosistemas costeros del país y la región del Caribe.