Con ausencia de opositores, diputados del PRM eligen 15 candidatos para la Cámara de Cuentas
El Senado evaluará al grupo de elegidos y los reducirá a los cinco funcionarios que dirigirán la Cámara de Cuentas

Tras casi tres meses de evaluaciones y depuraciones, la Cámara de Diputados escogió este miércoles a los 15 aspirantes mejor valorados para integrar el nuevo Pleno de la Cámara de Cuentas y envió la lista al Senado, que deberá ver los perfiles y tomar la decisión final de escoger a los cinco funcionarios que dirigirán la entidad fiscalizadora hasta el año 2029.
La decisión contó con el voto mayoritario de 130 diputados del Partido Revolucionario Moderno (PRM), pero no con el respaldo de la oposición, que calificó la decisión de la Cámara Baja como "aplastante e ilegítima".
Los 15 postulantes seleccionados
- Francisco Franco
- Cesáreo Guillermo Veloz
- Yira Henríquez
- Ferdinan De León
- María Aurelina Estévez
- Emma Polanco
- Charles Betances
- Maribel del Carmen Reyes
- Francisco Tamárez
- Rayner Castillo
- Edward López Ulloa
- Ramón Méndez
- Claudia Álvarez Troncoso
- José Miguel Fernández
- Griselda Gómez Santana
Informe disidente
Aunque los 15 preseleccionados fueron elegidos por una votación arrolladora del PRM, los congresistas de la Fuerza del Pueblo y del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) se retiraron del hemiciclo como forma de protesta ante lo que tildaron como una "imposición" del oficialismo.
Antes de irse de la sesión, la bancada de la Fuerza del Pueblo presentó un informe disidente en el que expuso su inconformidad con la elección y con el proceso, calificándolo de ilegítimo.
Los diputados Yuderka de la Rosa y Miguel Espinal, dos legisladores de la Fuerza del Pueblo que pertenecieron a la comisión que evaluó a los aspirantes, detallaron en su informe disidente que "hubo una clara imposición" para establecer a los candidatos y pronosticaron que la decisión del oficialismo, sin un consenso político, derivaría en falta de institucionalidad en la Cámara de Cuentas y haría que se repitan los conflictos internos que sucedieron en la institución en el 2023.
Mientras que el PLD, representado por su vocero Gustavo Sánchez, precisó que, aunque la decisión es legal porque cuenta con los votos mayoritarios requeridos, no es legítima porque no tiene el apoyo de la oposición ni obtuvo un consenso para el trámite final.
En ese orden, Sánchez dijo que la práctica del oficialismo "es excluyente" y que estaría vinculada a un supuesto "amarre" del partido gobernante para protegerse ante posibles actos ilegales en el Estado.
Aunque todos los opositores se retiraron del hemiciclo para no votar por los candidatos a la Cámara de Cuentas, la única que se mantuvo en la sesión fue la diputada Ydenia Doñé, representante de San Cristóbal por el PLD.
El PRM se responsabiliza
Como respuesta, el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco expresó que el PRM se responsabiliza por los futuros resultados del Pleno de la Cámara de Cuentas ya que, como puntualizó, la escogencia de los candidatos se hizo apegada a los perfiles profesionales y las capacidades, descartando cualquier afiliación política de los aspirantes.
"Nos estamos cuidando de que ellos (los candidatos) no tengan arraigos para que la Cámara de Cuentas no se haga infuncional", destacó Pacheco.
¿Qué sigue ahora?
Después de la escogencia de la Cámara de Diputados, el Senado revisará los 15 perfiles y los reducirá finalmente a los cinco miembros titulares de la Cámara de Cuentas que estarán en su puesto hasta el año 2029.
Los actuales quedan fuera
De los actuales miembros titulares de la Cámara de Cuentas, tres se inscribieron en diciembre para continuar por otros cuatro años en sus cargos de liderazgo en el organismo auditor, pero fueron descartados por la comisión de diputados tras los escándalos que encabezaron a mediados del 2023.
Dos años después de estar en sus cargos, los funcionarios que dirigen la Cámara de Cuentas estuvieron a punto de ir un juicio político en el Congreso bajo señalamientos de archivar ilegalmente auditorías delicadas, poner trabas en su propio trabajo, usurpar funciones de otros funcionarios en la entidad y registrar un rendimiento pobre en su labor.