Qué les pasa a los adolescentes: tres preguntas que debes entender
Identidad, emociones y propósito son las dudas que deben descubrir los adolescentes de hoy
La adolescencia es una etapa de grandes transformaciones físicas, emocionales y psicológicas. Durante este proceso, los jóvenes atraviesan desafíos y buscan reafirmar su identidad, explorar sus emociones y definir su propósito en la vida.
En el II Congreso Internacional de Educación y Crianza Intencional se dictó la charla "Desbloqueando la adolescencia" impartida por Diana Al Azem (@adolescencia_positiva), donde ofreció recomendaciones para apoyar a los padres y educadores a comprender los pilares que estructuran esta etapa.
Según explica Al Azem, los adolescentes están en una etapa donde se cuestionan tres cosas: ¿quién soy?, ¿qué siento? y ¿qué hago con mi vida? Aquí te recopilamos las formas de manejar cada una:
¿Quién soy? – La búsqueda de identidad
En la adolescencia, los jóvenes se enfrentan a una etapa de exploración profunda sobre su identidad. Necesitan descubrir quiénes son, qué les gusta y qué los define. Para acompañarlos en este proceso, es fundamental enfocarse en las 'tres c':
· Conexión: el primer paso para ayudar a un adolescente a encontrar su identidad es establecer una conexión genuina con él. La escucha activa es clave aquí.
Escuchar sin juzgar, con empatía y comprensión, le permite sentirse comprendido y acompañado en su proceso. En esta etapa, conectar con su entorno y con los adultos cercanos es esencial para construir su autopercepción.
· Control: los adolescentes necesitan sentir que tienen control sobre sus decisiones y su vida. Es importante darles espacio para tomar decisiones, incluso si esto implica que se equivoquen. Los padres no deben intentar salvar a sus hijos de las consecuencias de sus actos.
Como se dice, 'déjalos que la vida les ponga las consecuencias'. Si llegan tarde, no entregan un trabajo o no estudian, ellos mismos experimentarán las consecuencias de sus decisiones, lo cual es parte del proceso de maduración.
· Competencia: a los adolescentes les gusta sentir que son competentes, que pueden lograr cosas por sí mismos. Los padres deben ofrecerles la oportunidad de destacarse, pero sin presionar. Deben sentirse apoyados para ser quienes realmente son, mostrando que son valiosos, tienen opiniones y se les escucha.
Ley del espejo
De acuerdo con el psicólogo Yoshinori Noguchi, en la relación con los hijos también se reflejan aspectos de sus padres:
- Lado opuesto: los adolescentes a menudo permiten comportamientos que los padres no se permiten a sí mismos. Reflexionar sobre esto puede llevar a replantear las propias exigencias y flexibilizar algunas expectativas.
- Similitud: a veces, los padres se tensan al ver en sus hijos comportamientos o actitudes que consideran erróneas, pero que recuerdan haber tenido en su juventud. Es importante entender que los hijos no son una réplica exacta de nosotros, por lo que sus decisiones, aunque parezcan un error, son parte de su propio camino.
- Expectativa: los padres tienden a tener expectativas irreales sobre sus hijos, creyendo que su éxito o fracaso refleja su propio éxito o fracaso. Es esencial entender que cada hijo tiene su propio destino y su forma de aprender y crecer.
- Patrón repetitivo: a menudo, los padres repiten patrones de comportamiento que alguna vez juraron no seguir, como frases o actitudes que sus propios padres les inculcaron. Reflexionar sobre estos patrones ayuda a evitar caer en ellos.
14 respuestas de experto para entender a tu hijo adolescente
¿Qué siento?– Inteligencia emocional
La adolescencia es también una etapa de intensas emociones. Los adolescentes no siempre saben cómo gestionar lo que sienten, por lo que los adultos deben ser su guía. Los padres deben ayudar a sus hijos a identificar y gestionar sus emociones, fomentando una comprensión emocional sana.
- Negación: negar las emociones de los adolescentes o minimizar lo que sienten no es una solución. A veces los padres tienden a restarle importancia a los sentimientos de sus hijos, pero esto puede llevar a que los adolescentes se sientan incomprendidos.
- Distracción: usar distracciones (como las pantallas o el consumo de sustancias) no resuelve los problemas emocionales. La distracción solo es un parche temporal que impide el proceso de reflexión emocional. Los adolescentes necesitan apoyo para enfrentar sus emociones, no evitar que las sientan.
- Dramatización: a veces, los padres tienden a dramatizar las situaciones, responsabilizando a sus hijos de su propio malestar ('¡Dios mío, me vas a matar!'). Es importante evitar este tipo de reacciones, ya que solo aumentan la tensión emocional.
Tipos de reacciones emocionales en los adolescentes
Implosivas: se caracterizan por el auto-rechazo, la queja, el castigo y la resignación. El adolescente puede sentirse inútil o incapaz.
Explosivas: son reacciones externas, como la ira, la rebeldía o la confrontación. En este caso, el adolescente exterioriza su malestar de forma agresiva, ya sea física o verbalmente.
Los padres deben ser conscientes de estas reacciones y estar preparados para ayudar a sus hijos a gestionar sus emociones de manera constructiva.
¿Qué hago con mi vida? – La búsqueda de propósito
La adolescencia es también la etapa en la que los jóvenes comienzan a formular preguntas sobre su futuro y propósito. Para apoyarlos en este proceso, se puede tener en cuenta las inteligencias múltiples de Howard Gardner. Según Gardner, cada persona tiene una habilidad o talento dominante en alguna de estas áreas:
- Físico-kinestésica: inteligencia relacionada con el deporte y el movimiento.
- Visual-espacial: habilidad para entender y trabajar con imágenes, formas y espacios.
- Lógico-matemática: capacidad para resolver problemas numéricos y lógicos.
- Musical: aptitudes para la música, como el canto, el ritmo o la composición.
- Verbal-lingüística: facilidad para las palabras, los idiomas, la escritura y la comunicación.
- Naturalista: interés por los animales, las plantas y el medio ambiente.
- Emocional: inteligencia interpersonal (relación con los demás) e intrapersonal (conocimiento de uno mismo).
Como padres, hay que observar a los hijos y fomentar aquellas áreas donde muestran más interés o talento. El objetivo es ayudarles a descubrir su propio camino, respetando sus intereses y no imponiendo expectativas que no sean las suyas.
El círculo de la motivación – Valentín Fuster
El círculo de la motivación, propuesto por Valentín Fuster, se compone de cuatro elementos esenciales que los padres deben fomentar en sus hijos:
- Actitud positiva: los padres deben ser un modelo de actitud positiva ante la vida, mostrando a sus hijos que las dificultades se pueden superar con optimismo.
- Autenticidad: es fundamental permitir que los adolescentes tomen sus propias decisiones, que se definan por sí mismos. Los hijos no son 'mini versiones' de sus padres.
- Aceptación: los adolescentes deben entender que el error forma parte del proceso de aprendizaje. Aceptar que se equivoquen y aprender de sus errores es crucial para su desarrollo.
- Altruismo: ayudar a los demás, sin esperar nada a cambio, es una de las formas más poderosas de motivar a los adolescentes. Fomentar actividades de voluntariado o generosidad puede tener un gran impacto en su crecimiento personal.
La adolescencia es una etapa compleja, pero llena de oportunidades para el crecimiento. A través de los pilares de la identidad, la inteligencia emocional y el propósito, los padres pueden acompañar a sus hijos en este proceso de descubrimiento, ayudándolos a convertirse en adultos seguros, empáticos y competentes.
La clave está en escucharlos, darles espacio para equivocarse y guiarlos para que encuentren su propio camino en la vida.