"Una batalla tras otra", Paul Thomas Anderson regresa con su proyecto más esperado
El icónico director viaja entre la acción, el caos y la familia en la nueva cinta con Leonardo DiCaprio, Sean Penn y Benicio Del Toro

Después de casi dos décadas en gestación, Paul Thomas Anderson finalmente lleva a la pantalla grande Una batalla tras otra, un proyecto que mezcla acción, drama y comedia con un núcleo profundamente humano: la relación entre un padre y su hija.
La producción de Warner Bros. Pictures, en colaboración con Ghoulardi Film Company, se estrenó el pasado 25 de septiembre de 2025 en formato VistaVision, 70 mm e IMAX.
Un origen de larga data
La productora Sara Murphy cuenta que Anderson ha trabajado por partes en esta historia durante veinte años, con un guion que ha cambiado una y otra vez.
- “Me parece que Paul lleva casi 20 años en el desarrollo de este proyecto, por pedacitos. Y, evidentemente, el guion ha cambiado a lo largo de los años… en el fondo, trata realmente del amor de un padre por su hija y de lo que él es capaz de hacer para protegerla y salvarla. Y luego, tenemos mucho caos y diversión alrededor de eso”.
El propio Anderson recuerda que la semilla del proyecto fue su interés en escribir una película de acción con persecuciones de coches, a la vez que exploraba la posibilidad de adaptar Vineland de Thomas Pynchon.
Consciente de la dificultad de llevar el libro completo al cine, decidió tomar solo las ideas que más le resonaban y combinarlas con otras que lo habían acompañado durante años.
Acción contemporánea con sabor personal

Aunque se ha hecho famoso por sus dramas de época, Anderson optó esta vez por la contemporaneidad, lo que describe como una experiencia liberadora.
El rodaje lo llevó desde El Paso, Texas, hasta Eureka, California, lugares que también influyeron en la construcción de la historia, lugares que lo inspiraron para la historia.
“Como espectador, lo que quiero ver en la pantalla es una historia con la que pueda identificarme, que sea emotiva… En esta película, se trata realmente de dos cosas: ¿podrá este padre encontrar a su hija? y ¿qué significa ser una familia?”.
Un reparto de lujo

La cinta está encabezada por Leonardo DiCaprio como Bob, un revolucionario en decadencia. Para el actor, lo más atractivo fue finalmente trabajar con Anderson, algo que llevaba más de dos décadas esperando; y es que la oportunidad de colaborar con un cineasta que siempre ha abordado temas de forma inesperada y misteriosa le resultaba irresistible.
“Paul Thomas Anderson, más que nada, fue lo que me atrajo a este proyecto… Llevo más de veintitantos años queriendo trabajar con él, y poder hacer una película acerca de este tema en este momento de la historia es muy significativo para mí”, confiesa el actor.
Una constante que confirman todos los actores, incluido Sean Penn, que da vida al villano Lockjaw, quien asegura que el guion le llegó como un regalo: la libertad con la que estaba escrito y la sucesión de eventos le parecieron tan emocionantes que no pudo dejar de leerlo hasta el final.
Además, subraya lo especial que fue compartir por primera vez pantalla con DiCaprio, con quien mantiene una amistad de años.
Benicio Del Toro, quien interpreta al excéntrico Sensei, afirma que no necesitó leer el guion para aceptar: con tres letras -PTA (Paul Thomas Anderson)- ya estaba convencido.

Trabajar al lado de DiCaprio, agrega, fue un lujo, pues gran parte de su labor consistió en reaccionar y disfrutar de lo que el actor iba construyendo en escena.
La gran revelación de la película es Chase Infiniti en el papel de Willa, la hija de Bob. Anderson recuerda que desde el primer día de rodaje se comportó como una profesional, sin nervios aparentes.
La propia actriz señala que el corazón de la película está en la relación entre padre e hija, y que trabajar esa dinámica junto a DiCaprio le enseñó a profundizar en la psicología de los personajes más allá de la superficie.
El reparto se completa con Regina Hall como Deandra y Teyana Taylor como Perfidia.
Hall lo define con precisión: “Podría decir que es una película de acción, podría decir que es una comedia, podría decir que es un drama... las tres cosas, pero tendría que decir, específicamente, que es una película de Paul Thomas Anderson”.
Humor en medio del caos
Aunque la trama es oscura, Anderson encontró espacio para su humor característico. La comicidad no proviene de buscar la risa, sino de la sinceridad y lo absurdo de la naturaleza humana. Bob, con su persecución descabellada, genera situaciones hilarantes, mientras que el villano Lockjaw tiene destellos cómicos en su propia perversión y extravagancia.
“One Battle After Another”, drama que reúne a Leonardo DiCaprio, Benicio Del Toro y Sean Penn
Una colaboración que se siente como familia
El director destaca lo afortunado que se siente de trabajar con un equipo creativo estable desde hace años.
Para él, el cine es un deporte de equipo y la confianza, camaradería y apoyo mutuo son la base de su proceso.
"La colaboración es la mejor parte de hacer una película… es un deporte de equipo y estoy rodeado de personas a las que simplemente quiero, que son como una familia”.
Con Una batalla tras otra, Anderson confirma por qué sigue siendo uno de los cineastas más originales de su generación, entregando una cinta que promete intensidad, humanidad y un viaje inesperado, imposible de clasificar en un solo género, pero inconfundiblemente suyo.
Una película que, como señala Regina Hall, solo puede describirse de una manera: “Es una película de Paul Thomas Anderson”.