Camioneros latinos, los "reyes" de la carretera en EE. UU., pero también los "esclavos"
Explotación y riesgos en las rutas: la verdad detrás de la publicidad de camioneros en EE.UU.

Los camioneros hispanos representan cerca del 22 % de los conductores profesionales en Estados Unidos, un sector clave para la economía, pues alrededor del 70 % de los productos en el país se transportan por carretera. Sin embargo, estos trabajadores esenciales denuncian condiciones laborales precarias, bajos salarios y falta de protección, que los hacen sentirse "esclavos" del sistema.
Eldys O'Reilly, conductor cubano radicado en Texas, denuncia que, pese a ser "el motor de Estados Unidos", la realidad es que enfrentan explotación creciente y salarios que han disminuido en la última década, mientras asumen mayores riesgos.
El mercado laboral del transporte por carretera registra una escasez de 80,000 conductores que podría duplicarse para 2030, en parte por las nuevas exigencias de la Administración Trump, que incluyen dominar el inglés, lo que limita aún más la participación de trabajadores hispanos.
Oscar Lobos, mexicano con 27 años de experiencia, explica que la paga por carga se ha reducido drásticamente. "Si consigues 20 cargas en una semana, durmiendo pocas horas, ganarás lo que antes recibías por siete", señala, resaltando que las horas de espera para cargar y descargar no son remuneradas.
Billy Randel, líder del Movimiento de Camioneros por la Justicia, advierte que la profesión ya no garantiza calidad de vida. "Muchos no alcanzan a vivir con ese salario, son esclavos de un sistema que no permite rechazar cargas ni faltar, y a veces trabajan hasta 70 horas semanales por apenas 1,000 dólares", comenta.
Otros riesgos
Además de las malas condiciones salariales, los camioneros enfrentan riesgos adicionales al transportar materiales peligrosos sin la capacitación ni el equipo adecuados. José ´Chema´ Chávez, conductor en Nuevo México, denuncia la falta de información y protección frente a cargas tóxicas, inflamables y radiactivas, lo que representa un grave peligro para ellos y las comunidades cercanas.
El agotamiento extremo y las enfermedades crónicas vinculadas al estilo de vida también son comunes en la profesión. Jaime Vaquera, mexicano radicado en Texas, relata jornadas de hasta 30 horas esperando para descargar sin pago adicional, evidenciando el abuso generalizado.
- Ante esta realidad, camioneros y grupos ambientalistas han unido fuerzas para exigir mejores condiciones de trabajo, salarios justos y una regulación más estricta en el manejo de cargas peligrosas.